Agentes de Cáritas16/05/2022

Rosario Albert: «El objetivo en Manantial es que los menores se sientan importantes e iguales»

Hablamos con Rosario Albert, directora del Centro de Día Manantial de Cáritas Valencia.

El Centro de Día Manantial situado en el municipio de Burjassot, se encarga de atender a menores de edad entre los seis y los diecisiete años con quienes se trabaja de forma integral en muchos aspectos. Hoy Rosario Albert, la directora, nos explica más profundamente cómo funciona el día a día en Manantial.

«Manantial es un centro que da respuesta a las necesidades de una zona determinada. Trabajamos mayoritariamente con menores residentes en el barrio de las 613 viviendas. Atendemos a niños y niñas desde los seis hasta los diez años que forman el grupo de los pequeños y a adolescentes de entre once y diecisiete años que son el grupo de mayores» comenta Rosario, aunque hace hincapié en que, en la mayoría de las ocasiones, no suelen permanecer en el centro hasta esa edad: «casi nunca llegan a los diecisiete años, suelen pararse a los catorce o quince ya que al ser un lugar de convivencia y no de inserción, se ven demasiado mayores para estar aquí».

En Manantial atienden diariamente a 24 menores divididos en dos grupos de doce y con los que se trabaja de manera integral: apoyo social, educación en valores, talleres, convivencia: «Cada uno de los educadores es el referente de cada grupo: Tirso se encarga de los pequeños y Andrea de los mayores. Además, hay una trabajadora social y una integradora social a media jornada y una psicóloga a menos de media jornada. No somos una academia ni ningún centro para «estar por estar» tipo guardería».

Los menores de edad vienen derivados de los Servicios Sociales y provienen de familias desestructuradas, con algún tipo de problema o vulnerabilidad: «la idea que tenemos en Manantial es la de ser una pata más en sus vidas. La familia es la pata más importante. Nosotros no podemos suprimir lo que ellos hacen, pero sí servirles de apoyo».

Nos cuenta también cómo es el día a día del centro: «Trabajamos de forma integral y estructuramos las tardes de una forma concreta: los menores vienen de cinco a ocho de la tarde cuando acaban el colegio. En la primera parte de la tarde, meriendan, juegan un poco y hacemos refuerzo escolar. Ellos hacen sus deberes y les ayudamos en las dudas que tengan. Luego, dependiendo de la tarde, hacemos diferentes actividades. Por ejemplo, los lunes vamos al Centro de Día Díaz Pintado que pertenece al Ayuntamiento de Burjassot y en el cual tenemos un par de aulas asignadas para hacer cursos de informática y cocina. Los jueves están dedicados al deporte y vamos a la piscina municipal de Burjassot a hacer natación. El resto de tardes las empleamos en realizar talleres que tienen como base una educación en valores: les hablamos de los Derechos Humanos, de la violencia de género, de la homofobia… Los viernes están dedicados a las actividades de ocio y tiempo libre: o bien hacemos actividades en el centro, concursos, cumplemés (celebramos al final del mes todos los cumpleaños de los niños que cumplan años ese mes); o hacemos actividades fuera del centro, con visitas a diferentes sitios de Vàlencia. En Pascua, Navidad y verano hacemos senderismo, vamos a la playa, al campo… también tenemos un campamento de verano en julio».

En Manantial, es muy importante el trato con las familias de los niños, niñas y adolescentes: «Hacemos talleres para familias. Les proponemos talleres que creemos que son importantes como alimentación saludable, establecimiento de límites en el hogar, educación…».

En el ámbito personal, Rosario nos habla de cómo lo vive ella: «Llevo muchos años en Cáritas, sabes con qué personas trabajas, es duro, pero te gusta estar ahí haciendo todo lo que está en tu mano, porque a veces, por mucho que queramos, no podemos abarcar y solucionar todo». También, nos cuenta cómo lo viven los niños y niñas: «Para ellos y ellas somos parte de su familia. Hay que tener en cuenta que, en ocasiones, su estancia en Manantial se alarga en los años. Es una relación a largo plazo y trabajar con ellos y ellas es muy fácil, son cercanos y se encariñan con todos, pero también llevan muy mal los cambios de personal. Para ellos, esto es una rutina diaria y los cambios los sienten como un mundo».

Por último, Rosario nos explica lo que es para ella el objetivo principal de Manantial: «El objetivo en Manantial es que los menores se sientan importantes e iguales. Vienen de familias desestructuradas y en muchas ocasiones ese hecho les marca y les hace sentir diferentes a los otros niños de su edad. Creemos en el niño, en su potencial como persona y en su capacidad de lograr el objetivo que se marque para llevar una vida digna».