Proyectos de Familia e infancia01/07/2024

La Universidad Católica asesora a padres, voluntariado y menores de edad sobre la LOPIVI

La Asesoría jurídica de la Universidad Católica de Valencia ha realizado una colaboración con Cáritas Valencia.

La colaboración del Departamento de Asesoría jurídica de la Universidad Católica de Valencia con el programa de Infancia, Familia, Adolescencia y Mujer de Cáritas Valencia pretende trabajar conjuntamente el ámbito de la LOPIVI (Ley orgánica 8/2021 de 4 de junio de 2021) de protección integral a la infancia y adolescencia frente a la violencia, desde el mismo centro, objeto de la ley. Así como la protección del menor, en general, está regulada por la Ley Orgánica 1/1996 de 15 de enero y sus sucesivas modificaciones, la LOPIVI la complementa y actualiza, centrándose en las situaciones de violencia a la infancia y adolescencia, recalcando, sobre todo, el buen trato y los entornos seguros que los sistemas de protección deben articular y la sociedad comunicar ante cualquier situación de violencia contra niños y adolescentes que observe o conozca. Esta ley supone un avance en la protección de infancia y adolescencia y proyecta su formación a familias, niños, niñas, adolescentes y a la sociedad en general.

La Asesoría jurídica de la Universidad Católica de Valencia propone a Cáritas una colaboración que permita a los estudiantes de derecho, que realizan el trabajo de fin de grado o de máster, ponerse a la escucha de una necesidad relacionada con el derecho y hacer un trabajo práctico para intentar atender esa necesidad.

Serán Borja Sánchez Barroso, profesor de Derecho Constitucional y coordinador de la Clínica Jurídica de la Facultad de Ciencias Jurídicas, Económicas y Sociales de la UCV, cuyo objetivo es formar en prácticas a alumnos de últimos cursos de grado y máster y Aitana Esteve Arrebola, recién graduada en Derecho, que en su trabajo de fin de grado, en vez de una investigación teórica ha elegido esta experiencia de transcendencia social, quienes nos presenten los caminos y conclusiones que ha planteado este trabajo conjunto.

Borja, ¿esta experiencia tienen un tinte innovador y muy apropiado, buscando el centro mismo de la Ley la infancia y adolescencia más vulneradas?

Se da la circunstancia de que quienes más saben de esta Ley son las que están al pie del cañón, las responsables del programa de Familia de Cáritas, y en la Universidad, desde la parte académica, nos interesa estar en las últimas novedades, analizando las leyes para ver qué aportan de nuevo. En esta Ley se ha intentado reforzar la protección de la Infancia y la adolescencia de la forma más extensa posible. Tenemos que prevenir, detectar con anterioridad, anticiparnos a todo tipo de violencia, entendida en su más amplio sentido y en todos los lugares, entidades, colegios, centros deportivos… Y si intentamos hacer las cosas mejor en materia de prevención de violencia en estos sectores, se tiene ya mucho ganado.

Aitana, si habéis tenido que dirigiros al voluntariado, progenitores, niños y niñas, habréis tenido que modificar vuestro lenguaje técnico por uno más asequible y coloquial para captar mejor su atención e interés.

Exacto. Tanto Álvaro como yo hemos adaptado, para cada tipo de taller y para cada charla, el lenguaje, los trabajos y presentaciones. Si teníamos un taller con niños y niñas, lo hacíamos más dinámico, más fácil de entender. Si era con los padres, hablábamos de otra manera, tratando casos prácticos. Con personas voluntarias, más en nuestro lenguaje habitual.

Borja, ¿habéis trabajado en equipo para la preparación de los talleres?

Como trabajamos en el marco de la Clínica Jurídica de la UCV, lo que hacemos es que un o una estudiante realiza su trabajo de fin de grado en lugar de en una investigación teórica, en un trabajo práctico con una necesidad real de una entidad como Cáritas. El o la estudiante cuenta con un tutor de la Universidad que es quien acompaña todo el proceso para ayudar, tanto en la parte jurídica como en la parte de preparación de los talleres, pero el proceso del trabajo lo han hecho, en este caso, Álvaro y Aitana.

Aitana, ¿qué habéis encontrado en cada uno de los talleres, porque también será importante esperar opiniones y preguntas?

Con los niños empezamos porque, por ejemplo, no entendían lo que es una ley u otras cuestiones de contenido de la ley. Esas dificultades las teníamos previstas y llevábamos preparados juegos y ahí ya supieron entender los derechos que tenían y lo que es la violencia.

¿Tiene que ser entretenido para que lo entiendan y asimilen?

Claro. También les explicamos los pasos a seguir, a quién acudir cuando se les está ejerciendo violencia.

¿Y con los padres y madres?

Había muchos que eran de otras culturas, pero pronto nos dimos cuenta de que se sentían involucrados en las charlas. Prestaban atención, intervenían y hacían buenas preguntas.

Interviene Andrea Tarancón, una de las responsables del Programa, para apuntar que estas familias están bastante acostumbradas a recibir desde Cáritas constantes mensajes de todo lo que tiene que ver con la violencia hacia la infancia. También hay una parte social muy importante porque cuando estas familias están luchando, día a día, por su supervivencia, por sacar adelante a los hijos e hijas, por no tener una vivienda digna, dificulta la observancia de algunos de los puntos de los que habla la ley que tienen que ver con el tiempo de dedicación, la escucha o el buen trato y choca cuando les transmitimos este mensaje que, obviamente, es muy bueno. Las dificultades con las que se encuentran hacen que muchas actitudes sean complicadas. No hay una falta de creencia en la ley ni ganas de ponerla en práctica, es que el entorno social en el que viven, no lo facilita.

Aitana, ¿vuestro trabajo con el voluntariado ha requerido otra forma de tratar la Ley?

Las personas voluntarias eran, en su mayoría, profesores o tenían relación, en su día a día, con menores y compartir con ellos esta nueva ley era para que fueran conocedores de su amplitud y cómo aplicarla en su ámbito, tanto profesional como de voluntariado. Surgían en el debate temas importantes, como los límites de la potestad de los padres, que tratábamos entre todos.

Borja, ¿los organismos que tienen las facultades para aplicar la Ley, tienen recursos suficientes para implementarla?

El tema salió en las tres sesiones que dimos. La Ley hace un esfuerzo muy loable, va en la dirección correcta pero el día a día será complicado si no se la dota de medios, de presupuesto. Las entidades como Cáritas son las que, muchas veces, están cubriendo lo que los poderes públicos deberían cumplir.

Por último, Aitana, ¿este trabajo qué repercusión puede tener en tu futura carrera profesional?

Para mí esto ha sido un proyecto muy reconfortable. He aprendido mucho y me llevo una experiencia muy grata.